Trastornos Alimenticios: ¿Cómo identificarlos?
La forma de alimentarnos, cada cuánto lo hacemos y la cantidad de la ingesta revelan mucho sobre nuestro estado mental. Salirse de la norma no está mal en la mayoría de los casos, pero llegar al extremo de restringir o exagerar en las porciones, es un indicativo de un desorden. Por ello, te mostramos cómo identificar los trastornos alimenticios.
Este desajuste está causado muchas veces por nuestra forma de ver la vida o de concebirnos a nosotros. Por ejemplo, seguir un patrón de belleza delgado lleva a muchos a la anorexia. Es ese mismo pensamiento errado quien pone nerviosos a otros, e incapaces de cumplir con el canon, desarrollan un trastorno alimentario compulsivo.
Además, en la actualidad va en aumento el número de personas con problemas en la ingesta debido a una causa psicológica. En España casi el 10 porciento de la población sufre alguno de ellos.
Síntomas de los trastornos alimenticios
El principal modo de prevención contra un posible caso es detectarlo a tiempo antes de volverse una costumbre en el individuo. Son diferentes enfermedades las agrupadas bajo las siglas TCA, sin embargo, tienen algunos síntomas en común. Estos son los principales indicios a tomar en cuenta.
Mal estado de salud
Los desajustes en la dieta no solo tienen un impacto en el peso corporal, más comúnmente el primer síntoma es no sentirse bien de salud. Algunas personas experimentan dolores de cabeza repetitivos, padecen de insomnio, tienen falta de concentración y se sienten cansados. Ese es el resultado de un metabolismo sobresaturado o con baja ingesta calórica.
Por otro lado, en los pacientes con anorexia, el pulso se encuentra por debajo de sus niveles normales. En consecuencia, se desmayan de improviso al realizar tareas de poco esfuerzo. También se acrecienta la anemia sin importar cuánto tiempo se duerma.
Cambios en la percepción de tu imagen
Anteriormente mencionamos que las causas de los trastornos alimenticios tienen mucha relación al estado mental de quién los padece. Aquí nos referimos no solo a una preocupación por llegar a un peso irreal, sino también a la forma en cómo nos vemos. Las personas con anorexia, por ejemplo, suelen verse con sobrepeso sin importar los datos reales.
Esas imágenes se van acrecentando en la mente, impidiendo ver el estado del cuerpo. Por ello, muchos no se detienen a ver la gravedad del asunto.
Variaciones de ánimo
Otra de las formas de detectar los trastornos es hacer una revisión del humor durante la jornada. Cambiar radicalmente la dieta impide la producción de hormonas como la serotonina, dejándonos propensos a experimentar estados de depresión. Otro cambio notorio es el aumento de los niveles de estrés.
Tener ataques de irritabilidad también es consecuencia de una mala alimentación. Por otro lado, la ansiedad es frecuente en quiénes padecen estos desordenes, porque gran parte del día mantienen pensamientos intrusivos sobre evitar comer o haberlo hecho en exceso.
Cambio de peso notoria
Este es el más evidente de los síntomas y es resultado tanto de modificar la cantidad del insumo cómo de hacerlo de forma descontrolada. Con el pasar de los días el peso sube en quiénes tienen atracones o se refugian en esa actividad para calmar otras angustias.
Por el contrario, los trastornos alimenticios en adultos cómo la anorexia, rápidamente hacen bajar de talla a quien la padece. Hablamos de cambios evidentes ocurridos en poco tiempo, muy diferentes a aumentar o disminuir un para de kilos en una temporada larga.
Actitudes extrañas en relación a la alimentación
Por lo general, no nos preocupamos por la comida a menos que sigamos una dieta o dejemos los productos chatarra. En cambio, una persona con un problema de alimentación se preocupa tanto por ello al punto de interferir en otras actividades. Esa actitud va de la mano con evitar ingerir cualquier cosa frente a otros o sentir ansiedad por ello.
Otra actitud extraña es comenzar de improviso a seguir estrictamente alguna dieta con la finalidad de bajar de peso. También está el caso de no consumir nada durante el día para luego tener un atracón. Por lo general, a quienes le suceden utilizan laxantes en abundancia y tienen comida oculta de los demás integrantes de su familia.
5 trastornos alimenticios
Los estudios han determinado varias formas de los llamados trastornos alimenticios, cada uno con causas y consecuencias distintas. Estos son los principales:
- Trastorno de atracón: Quienes lo padecen comen fuera de control por un periodo corto de tiempo y en cantidades muy grandes. Por lo general, ese lapsus viene precedido de un nerviosismo o estrés difícil de ignorar.
- Bulimia nerviosa: Como su nombre lo indica, el factor de la angustia está presente en casi todo el día. La mayor parte del tiempo evitan consumir cualquier alimento, lo cual los lleva a tener atracones. Luego de ello vuelven al ayuno como medio para evitar subir de peso.
- Anorexia nerviosa: Este es el más asociado a una percepción errónea de la figura corporal. Quienes la sufren reducen progresivamente la cantidad de comida de su dieta por temor a aumentar de talla.
- Ortorexia: Es una variación de la anorexia, aunque sus causas son bastante diferentes. En lugar de la preocupación por sumar kilos, las personas restringen a toda costa productos poco saludables. Esto los lleva a evitar grupos enteros de alimentos y en consecuencia sufren desnutrición.
- Vigorexia: Se trata de un consumo excesivo de suplementos para ganar masa muscular acompañados de una rutina demasiado exigente de ejercicio. Los más propensos a sufrirla son los hombres y como la anorexia se relaciona a una imagen distorsionada del físico.
Conclusiones
Los trastornos de la alimentación son un problema grave y acarrean consecuencias en la salud. Por ello, es importante atender a los síntomas, si los identificas en ti o en un conocido es recomendable la asistencia de profesionales. Con ello, evitarás padecer por un largo período de las consecuencias de los tipos antes descritos.
Esperamos te sean de ayuda las recomendaciones sobre cómo identificar los trastornos alimenticios. En nuestra clínica nos ponemos a tu disposición con psiquiatras y psicólogos quienes te guiarán en el tratamiento más efectivo. Igualmente, si te gustó este artículo tenemos más relacionados en nuestra web.